Aunque parezca mentira, no hace tanto tiempo, los niños (y no tan niños) jugaban a juegos que funcionaban sin baterías ni electricidad, toda la diversión se basaba en un dado y fichas de colores. Los juegos de mesa constituyeron una fuente de inspiración para mucha gente, a la vez que fomentaron su creatividad y desarrollaron su imaginación y, a la postre, su inteligencia.

Uno de mis favoritos fue, sin lugar a dudas, La Ruta del Tesoro de la empresa CEFA; un juego que básicamente tenía las mismas reglas que el Monopoly, pero ambientado en ciudades antiguas y cuya misión era la de arruinar a tus contrincantes.

Cuando estaba buscando imágenes del juego para el post, he caído en la cuenta de que hacía aproximadamente 22 años que no veía el tablero de la imagen, más o menos desde que entró en mi casa la Nintendo 8 bits.

La moneda oficial del juego eran los Reales aunque para transacciones mayores tenías el Pagaré que, hasta que no eres mayor no acabas de comprender para que sirve 🙂

Por lo que he visto, en ebay puedes encontrar algunas unidades del juego a un precio relativamente normal, aunque en el estado en el que estaban las que he visto, no es recomendable.

Si quieres ver más imágenes del juego puedes encontrarlas aquí.

Por cierto, este post ha venido inspirado por una galería de juegos de mesa antiguos encontré casualmente.